Crédito: Dana Hernández
El automóvil como símbolo de éxito es una barrera hacia la movilidad diversa: Mariana Bahena Sánchez
Por: Dana Hernández
Con el fin de comprender de qué modo es posible implementar una movilidad diversa en el municipio de San Pedro y el resto del área metropolitana, entrevistamos a Mariana Bahena Sánchez, egresada de la Ingeniería en Desarrollo Sustentable con enfoque en urbanismo por el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) y experta en movilidad que ha trabajado para la Fundación FEMSA.
Así mismo, Bahena Sánchez explora los beneficios, desafíos y estrategias para promover una movilidad más inclusiva y sostenible en la ciudad a través de su experiencia trabajando en el mejoramiento de espacios públicos.
¿Cuáles son los beneficios de moverse en bicicleta dentro de la ciudad?
Como ciclista, soy consciente de que la bicicleta no es la solución a todo. Sin embargo, tiene beneficios para la salud mental y física y no emite dióxido de carbono. Por lo tanto, aunque la bicicleta no sea la respuesta a cada problema, debemos meterla en la ecuación. Es una herramienta que ayudaría en los viajes de última milla o último kilómetro –como se conocen–, útil en sitios como Centrito o Casco Urbano, Valle Oriente, La Purísima, el centro de Monterrey, etcétera. En lugar de que la gente se mueva entre de las cuadras en automóvil, podría caminar, andar en bicicleta o scooter. Deben incluirse todas éstas opciones de micromovilidad, pues la infraestructura no se piensa solo para bici, también para el peatón. Una ciudad es diversa tanto en habitantes, ecosistema y actividades económicas como en su forma de moverse.
¿Qué opinas en cuanto a que muchos sampetrinos se quejan de mejoras que “no pidieron” o que “no se usan” como la ciclovía de Alfonso Reyes, o la restauración del Centrito?
Durante la administración actual [periodo de Miguel Treviño] he trabajado con personal sumamente capacitado en la labor correspondiente. Y aunque la mayoría vivimos y crecimos en San Pedro, algunos vienen de Monterrey, San Nicolás, Santa Catarina, etcétera. San Pedro tiene 131 mil habitantes, pero cada día ingresan millones de personas de distintos municipios. ¿Se está considerando la calidad de vida y habitabilidad de esas personas que entran y salen de San Pedro? Las personas tienden a apropiarse de los espacios: “Esto es mío y no lo comparto con nadie más”. ¿Queremos que así se tomen las decisiones, con base en los prejuicios de ciudadanos que no ven fuera de su comodidad, o con datos? Debe entenderse que un porcentaje viene a trabajar; algunas personas son cuidadoras del hogar o de adultos mayores. Hay que abrir el diálogo a todas estas gamas y dinámicas a la hora de hacer inversiones.
Existe, por ejemplo, la idea de que no se usan las mejoras, como es el caso de la ciclovía de Alfonso Reyes. Pero solo se construyeron cuatro kilómetros; desde luego, las personas no van a sacar el mayor provecho, pero sí se usa. Los estudios que se hicieron antes y después de la instalación arrojan menos hechos viales, así como un incremento en el número de ciclistas que pasan por la avenida. Además, es necesario aceptar que –independientemente de que se use o no– es un derecho que la ciudad esté conectada por medios de transporte y sea segura. Debemos trabajar en conjunto y escuchar, el proceso de construir y diseñar la regeneración de la ciudad puede ser y es participativo.
¿Consideras que el clima y/o la elevación causada por las montañas de Monterrey son un factor que impide o restringe la movilidad diversa? ¿Cómo adaptar la movilidad a estas condiciones?
Monterrey no es el único lugar donde existen condiciones de clima desfavorables para la movilidad en bici o peatonal. Sin embargo, hay formas de adaptación, como espacios para ducharse en el trabajo, horarios y rutas donde el calor o el frío no limitan, etcétera.
En cuanto a la elevación, hay que tomar en cuenta el uso de suelo: está prohibido construir en una pendiente arriba del 40%, regla que no se respeta. Eso limita la estructura y posibilidad de movilidad.
Se busca que los trayectos en bici sean cortos, no más de 30 minutos, de oriente a poniente. El municipio de San Pedro mide 11 kilómetros, distancia corte que vuelve posibles los trayectos en bicicleta.
¿De dónde crees que previene la resistencia a la movilidad diversa en esta ciudad?
Considero que es un fenómeno social, cultural, y de forma de vida. El automóvil representa privilegio y éxito dentro de la sociedad, lo que genera resistencia, es una barrera hacia la movilidad diversa. Confrontar la idea de que un símbolo de éxito no es tan eficiente como nos hicieron creer es duro y limita las posibilidades de abrirnos.
¿Qué recomiendas a quienes buscan un estilo de vida con un menor uso del automóvil en una ciudad con estructura limitada para ello?
Pueden empezar por conocer las zonas donde viven, trabajan o estudian. Hacer una pausa y darse el momento de respirar, observar, y explorar lo que hay en el espacio donde uno se mueve. Incluso pueden utilizar aplicaciones de mapas y buscar lugares cercanos a los que sea posible llegar caminando: parques, restaurantes, etcétera.
Otra recomendación es subirse al transporte público. Parte del problema en la falta de mejoras es que las personas con el privilegio de hacer algo al respecto no utilizan estos medios de transporte, pues quienes carecen de alternativas para moverse no suelen tener el tiempo ni la posibilidad de hablar al respecto; esto dado por un desequilibrio social.
Para finalizar, ¿cómo utilizas las redes sociales para hablar sobre este fenómeno? ¿Crees que son útiles los medios de comunicación para crear conciencia?
Totalmente. Ahora mismo trabajo en la estrategia de la marca de IMPLANG (Instituto Municipal de Planeación y Gestión Urbana) y la comunicación de sus proyectos en redes, desde la parte educativa, la de información, y difusión. Además, documento mi experiencia y expongo datos que investigo a través de mis redes personales. No es solo algo que me interesa y estudio, sino que lo vivo.
Creo que los medios de comunicación deben cubrir este tema con más información, hacer que nos preguntemos cómo nos sentimos, cómo solucionar, qué tiene que pasar para que un cambio suceda.
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