El efecto Messi en la MLS: un golpe mediático


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Por: Pilar Gacioppo

El Inter de Miami, un equipo fundado en 2018, anunció el pasado 15 de julio el fichaje de Lionel Messi. La idea de que el astro argentino, considerado por muchos el mejor futbolista del mundo, jugara en Estados Unidos, generó mucha polémica. Algunos aficionados y periodistas lo catalogaron como un desperdicio de los últimos años de su carrera, ya que es un país en donde existe una mayor tradición en otros deportes como el futbol americano, el basquetbol o el beisbol. 

Sin embargo, la llegada de Messi a Miami parece demostrar algo distinto: que el interés por el soccer es más grande de lo que se percibe y que la infraestructura –liga, clubes, afición–  tiene muchos años preparándose para algo así. 

Como era de esperarse, el arribo de Messi a la MLS creó un completo revuelo global y un inusitado interés en el equipo y en la liga. En una nota para ESPN, el analista Dan Hajducky dio a conocer que, en los días posteriores a la noticia de la transferencia, las búsquedas en Google en torno al equipo aumentaron en un 1200 %. 

En cuanto a las redes, de acuerdo con un artículo de Isaac Mizrahi para Forbes, en las 24 horas posteriores al anuncio, la cuenta de Instagram del Inter de Miami incrementó en un 500 %  sus seguidores y se convirtió en el quinto equipo estadounidense más seguido, superando en el camino a algunas de las franquicias más importantes de la NFL, la NBA y la MLB.

James Wagner, por su parte, publicó en el New York Times que, en cuestión de días, los precios para una entrada a un partido del Inter de Miami subieron de un promedio de 152 dólares a 850 en el mercado secundario. Al mismo tiempo, las camisetas del equipo se agotaron y Adidas, la marca encargada de la equipación, anunció que regresarán a estar en tiendas hasta octubre. 

Estos datos nos indican que una cantidad significativa de aficionados al futbol está volteando a ver una liga que no despierta mucho interés fuera de su país, el cual, como ya mencioné, también tiene otros intereses y prioridades deportivas.

No se les puede negar el esfuerzo que han hecho para incrementar su nivel deportivo y el arraigo de los aficionados a través de fichajes de estrellas internacionales. Esta tendencia, incluso, nos puede remitir a la década de los 70, cuando Pelé llegó a jugar al New York Cosmos.

Al acercarse a lo que representó aquel fichaje y compararlo con el de Messi, Camilo Durana, vicepresidente ejecutivo de la MLS, asegura que la diferencia fundamental entre un fichaje y otro es la fuerza de la Liga y cómo la tecnología permite el acceso a la información”.

“A diferencia de Pelé, Messi jugará en una liga competitiva y establecida, con estadios específicos de fútbol de última generación que brindan la experiencia adecuada para los fanáticos, academias que producen la próxima generación de estrellas y un producto de transmisión innovador y de clase mundial”.

Todavía puede tomar mucho tiempo para que el fútbol se convierta en una parte del ADN cultural y deportivo de los Estados Unidos;  y quizás la MLS nunca llegue a tener la misma popularidad dentro del país como la NBA la NFL o la MLB. Pero la realidad es que algo está pasando, algo que siempre ha sido muy complicado de comprender: Lionel Messi.

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