UDEM conecta el trabajo artístico de Rodolfo Nieto con obras prehispánicas
Por: Valeria García y Regina Torres
La muerte, las figuras antropomorfas, los animales dentro de la cultura y la religión prehispánicas, la cosmovisión de los pueblos mesoamericanos, figuras humanas y seres sobrenaturales quedaron plasmados en la obra del pintor oaxaqueño Rodolfo Nieto, quien usó el abstraccionismo, la intensidad de colores y la magia en la expresión de las formas para transmitir el misterio que encerraban sus creaciones.
Un conjunto de 33 obras de este artista conforman la muestra que está expuesta en el Centro de las Artes del Centro Roberto Garza Sada de Arte, Arquitectura y Diseño de la Universidad de Monterrey (UDEM).
La exposición Presencias inesperadas, que estará abierta al público en general hasta el 6 de octubre, establece una conexión con la Colección Prehispánica Alberto Fernández Ruiloba, un conjunto de más de 250 piezas de cerámica que se encuentran expuestas desde el año 2018 en el edificio Estoa de la Universidad.
Cada cuadro de Nieto tiene su equivalente en la exposición de figuras y objetos prehispánicos, lo que muestra la influencia que ejercieron las culturas mesoamericanas en la obra del artista.
Elisa Téllez, directora del Centro de las Artes, dijo que esta exposición forma parte de un proyecto que busca acercar el arte no solo a la comunidad universitaria, sino también al público externo. Dentro de este proyecto, el Centro suma ya tres exposiciones. En la primera se presentaron obras de Frida Kahlo y Rufino Tamayo, en la segunda se exhibieron obras del pintor mexicano Enrique Guzmán, y en esta tercera, los cuadros de Rodolfo Nieto.
“Hemos presentado arte moderno, pero también tendremos arte contemporáneo. Buscamos que nuestros alumnos admiren la belleza a través del arte, pero que también aprendan sobre composición, matemáticas, materiales y que vean que el arte es expresión de temáticas sociales y políticas, y que es una invitación a la reflexión”, explicó la directiva.
La obra de Rodolfo Nieto, quien falleció en la Ciudad de México en el año de 1985, tuvo influencias de las vanguardias europeas y de dos artistas mexicanos: del jalisciense Juan Soriano y del pintor zacatecano Pedro Coronel.
Miembro de la Escuela de Oaxaca, sus pinturas, que siguieron las técnicas de pintura al óleo, serigrafía, litografía, grabado, acuarela y collage, toman elementos fundamentales del México prehispánico, conceptos que comenzó a trabajar durante los diez años que vivió en París.
“Su obra encierra misterio y magia, como lo dijo en su momento Octavio Paz. El escritor mexicano y Premio Nobel de Literatura decía que si observábamos a detalle la obra de Nieto podíamos descubrir ciertas presencias que nos podían parecer inesperadas. Sus gatos, perros y figuras humanas tienen unos ojos que cuando los encuentras piensas que te están siguiendo y ahí es cuando la pintura te atrapa. Eso es lo bonito de la obra de Nieto”, aseguró Téllez.
Nieto, quien mostró en vida su fascinación por la alfarería zapoteca, le dio gran importancia a la figura humana en su obra. Representó, por ejemplo, un hombre con perico, el violinista, el cellista, el marimbero, la mujer con bonsai, el hombre con televisión, el acróbata, el tragafuego, la velada, el astrónomo, el contorsionista y el gramófono.
Los perros y los gatos son una constante en la obra del pintor. Estos animales tienen un fuerte simbolismo con los pueblos prehispánicos.
“En las culturas prehispánicas consideraban a los perros como guías espirituales a través de los niveles del cosmos, especialmente en el tránsito de la vida a la muerte. Y, en la mitología zapoteca, los gatos estaban asociados con los cielos, lo oculto y lo desconocido, siendo también símbolos de independencia y libertad”, se lee en la explicación de esta temática que acompaña a la exposición de la obra de Nieto.
El artista también representó a otros animales, como vacas, toros, cabras, búfalos, dromedarios, camellos, rinocerontes y avestruces, todos relacionados con la cultura mexicana.
Además, elementos como el tambor y otros instrumentos musicales, al igual que pinturas de seres híbridos, mitad humano mitad animal, son temáticas recurrentes en su obra.
El Centro de las Artes realizará todos los jueves recorridos guiados para quienes quieran conocer o admirar la obra de Rodolfo Nieto, dijo su directora, Elisa Téllez.
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