Una cantidad aproximada de 800 árboles fueron sembrados en los nuevos espacios de la Universidad de Monterrey, los cuales tienen como prioridad crear un pulmón y decorar los nuevos espacios recreativos para los alumnos, reveló Citlalli Elizabeth Calderón Villegas, gerente de remodelaciones y adecuaciones del campus.
Los estacionamientos de la zona nor-poniente del campus, que antes producían el efecto de isla de calor, fueron removidos para construir el Solar, el cual es toda el área con las nuevas secciones de la universidad, la zona tiene una adecuación de cinco hectáreas, donde hicieron la siembra de los árboles grandes y de diferentes especies, además de tener espacios para crear una intercomunicación entre los alumnos.
El nuevo sector ubicado detrás de rectoría llamado, la Cañada es un paso natural de agua que encauzaron para después adaptar y brindar más espacios de distracción, relajación, meditación y para hacer más áreas de uso común.
Hasta ahora, todo el proyecto ha tenido impactos positivos en el aspecto ambiental, porque además de formar parte del purificador de aire, se espera que sea un área de absorción donde se pueda tener más retención de agua o lluvias, todo con la finalidad de lograr bajar un grado centígrado.
“…lo que están buscando estos proyectos es generar los espacios para que se den esos puntos de encuentro y generemos, por medio de la infraestructura, ese valor agregado que tenemos como compromiso ante la sociedad, de ser sostenibles, de ser responsables, de ser congruentes, de ser comunidad”, señaló Calderón.
En el ámbito social y cultural, las nuevas áreas buscan brindar más dinámicas de interacción, ya que antes el campus contaba con uno o dos centros, que eran el Centro de la Comunidad Universitaria y el área de salones, ahora con la apertura del Solar y Estoa, el campus dejó de ser “monocéntrico” y ahora es “una pequeña ciudad” o “un campus policéntrico”, declaró Calderón.