A manera de protección y para evitar la propagación del virus Covid-19, distintos países han optado por cerrar sus fronteras y aeropuertos, obligando a las personas que se encuentran fuera de su país de origen a quedar varados en territorios ajenos a los suyos.
Tal es el caso de Francia García y Laura Rocha de Colombia, Pierre Olavarría de Perú y Ronaldo Gabriel de Brasil, estudiantes internacionales de intercambio en la Universidad de Monterrey (UDEM), donde se vió interrumpido su aprendizaje en el campus profesional desde el 17 de marzo a causa de la contingencia sanitaria y la cuarentena en Nuevo León.
Ninguno de los alumnos internacionales han podido regresar a sus hogares ya que actualmente, los aeropuerto de sus naciones se encuentran cerrados, restringiendo el acceso a su país, por ello existe incertidumbre sobre su pronto regreso a casa.
“Lo más complicado de pasar una contingencia así en un país diferente es estar lejos de tu familia, el a veces sentirse un poco solo. Si pudiera regresarme sí lo haría, pues no se sabe cuándo vuelvan a abrir las fronteras”, dijo Rocha.
Así mismo, Gabriel coincide en que lo más difícil de estar en un país distinto es permanecer distanciado de su familia, sabiendo que Brasil es uno de los lugar con más casos y decesos por Covid-19, donde incluso su vecina falleció a causa del virus, aunque que expresó que si tuviera la oportunidad de regresar en este instante, no lo dudaría.
Olavarría aseguró que está enamorado de México, de la cultura y de la empatía con la que los regios lo recibieron, con brazos abiertos, ya que él, a comparación del resto de los entrevistados, viene como vinculación profesional a través de AIESEC.
“Yo opté por culminar el intercambio porque no tengo nada que me detenga, me gusta lo que empiezo, terminarlo y hacerlo bien, al igual que mis compañeros de Brasil”, indicó el peruano.
Tres de los afectados coinciden que los gastos en Monterrey han aumentado, debido a que los cubrebocas, gel antibacterial, desinfectantes y sanitizadores son ahora productos esenciales en su despensa, así mismo, el costo de los recibos de diferentes servicios públicos como agua, luz y gas, ha incrementado debido a quedarse en casa.
Los estudiantes extranjeros revelaron que la UDEM, durante su estancia en México en esta pandemia, les llama con frecuencia y envía los enlaces de las diferentes cancillerías para estar informados y velar por su bienestar.
Los cuatro alumnos internacionales aseguraron que sus familias son su mayor soporte durante esta pandemia, el apoyo que les ofrecen a la distancia tanto económico como emocional es latente, y aunque los locales están dispuestos a ayudarles ansían pronto regresar a sus hogares.