Congreso de NL aprueba regreso de Samuel García a la Gubernatura
Por: Agencia Informativa UDEM
Después de cuatro días de incertidumbre política en el Estado, de amenazas y acusaciones mutuas entre el Congreso Local y el Gobernador electo, del retiro prematuro de una campaña presidencial y de la disputa por el Poder Ejecutivo estatal entre dos gobernadores, este lunes se zanjó la crisis cuando el Legislativo estatal aprobó la renuncia del Gobernador interino y aprobó el regreso de Samuel García a la gubernatura del Estado.
El Gobernador solicitó el 23 de octubre una licencia por seis meses para poder separarse de su cargo y competir por la Presidencia del País en las elecciones de 2024 en representación de Movimiento Ciudadano.
El Congreso del Estado primero le negó la licencia y el 26 de octubre la autorizó, pero designó al panista José Arturo Salinas, presidente del Tribunal Superior de Justicia, como Gobernador interino, en contravía de la designación que había hecho García de dejar como encargado del despacho a su Secretario de Gobierno, Javier Navarro.
Esto generó la presentación de una serie de recursos legales de las dos partes para tratar de invalidar mutuamente los nombramientos.
Las dos designaciones fueron rechazadas el 13 de noviembre por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, tribunal que le ordenó al Congreso Local nombrar a un nuevo Gobernador interino, tal como lo ordena la Constitución de Nuevo León en su Artículo 98.
El Gobernador Samuel García insistió en que el Congreso debía respetar la voluntad popular que eligió su propuesta en 2021 y por ello le envió el martes 28 de noviembre al Legislativo una propuesta con cuatro candidatos a ocupar su cargo: el Secretario General, Javier Navarro; la Secretaria de Igualdad, Martha Herrera; Iván Rivas, Secretario de Economía; y Hernán Manuel Villarreal, Secretario de Movilidad.
La noche del miércoles 29 de noviembre el Congreso eligió a Luis Enrique Orozco Suárez, exvicefiscal del Ministerio Público de la Fiscalía General del Estado de Nuevo León, como Gobernador interino de la entidad para ocupar temporalmente el cargo que dejaba el Gobernador Samuel García Sepúlveda.
La elección fue rechazada por el Gobernador y por Movimiento Ciudadano y desde ese momento se desató una «guerra» por la gubernatura que desembocó en la renuncia de García a sus aspiraciones presidenciales para retomar en el primer minuto del 2 de diciembre sus funciones como Gobernador e impedir que Orozco, quien es cercano al PRI pero dice no pertenecer a ningún partido político, se posicionara como Mandatario interino.
Con los accesos al Palacio de Gobierno blindados con unos 250 elementos antimotines de Fuerza Civil, la presencia de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano, y con barreras metálicas que impedían el acceso al recinto, el Gobernador sesionó con su equipo desde el viernes a medianoche hasta este lunes que el Congreso resolvió regresarlo al cargo.
Entre viernes en la noche y lunes la tormenta política incluyó amenazas del Congreso Local de dejar a García por fuera del Ejecutivo y de emprender acciones legales en su contra por impedir que Orozco se posesionara, tal como lo había dispuesto legalmente el Legislativo, mientras que el Gobernador amenazó al PRI y al PAN con hacer públicas sus peticiones y exigencias a cambio de dejar a Navarro en el cargo o de restituirlo a él.
Entre otras cosas, y siempre según el Gobernador, el PRIAN le habría exigido 2 mil 500 millones de pesos para el año entrante, desistirse de todas las carpetas penales contra Francisco Cienfuegos y Adrián de la Garza (líderes del PRI) y Raúl Gracia y Zeferino Salgado (líderes del PAN), no pagar impuestos los siguientes cinco años, nombrar a Adrián de la Garza como Fiscal General del Estado por nueve años y entregar la Auditoría Superior del Estado a un prianista por nueve años.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador le reprochó este lunes al PRI y al PAN estatales sus acciones durante esta crisis política y advirtió que, para impedir el regreso de García a la Gubernatura, serían capaces de dar un golpe de Estado en Nuevo León.
“Son capaces hasta de dar un golpe de Estado porque eso sería una destitución de alguien que fue electo democráticamente. Está interesante ¿no? Hasta dónde quieren llegar”, dijo el Presidente.
Este lunes la crisis política terminó luego de que el Gobernador interino, Luis Enrique Orozco Suárez, presentara ante el Congreso Local su renuncia al cargo a las 13:33 horas.
«Por la gobernabilidad de Nuevo León, he decidido hacerme a un lado y renunciar al cargo de Gobernador interino», dijo Orozco en rueda de prensa, en la que también estuvieron el priista Mauro Guerra, presidente del Congreso, y el panista Arturo Salinas, presidente del Tribunal Superior de Justicia.
Orozco afirmó que eligió tomar esta decisión porque se debe reconocer el derecho del Gobernador a reasumir las funciones para las cuales fue electo por la mayoría de los ciudadanos de Nuevo León.
Minutos después, el Congreso Local votó por unanimidad la renuncia de Orozco a la Gubernatura y por mayoría la revocación de la licencia otorgada al Gobernador y su reincorporación al cargo.
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