La obra Despertar de Primavera, representada por alumnos de la UDEM bajo la dirección de Hernán Galindo, se estrenó el pasado 27 de abril, en el centenario luctuoso su autor Frank Wedekind; la obra de 1891 cuenta la historia de un grupo de adolescentes en un pequeño pueblo, quienes comienzan a experimentar y enfrentarse a grandes cuestiones como la madurez, la moral, el suicidio y la sexualidad.
Despertar de Primavera probó ser una obra que une generaciones, tanto por la audiencia que llenó las butacas debido a su temática, como para las personas que trabajaron en ella, entre las que participaron desde alumnos con apenas unos meses de experiencia hasta profesionales que cuentan con más de 16 años en el mundo del teatro, como Galindo.
Fernando de Silva, estudiante de Licenciatura en Producción Cinematográfica Digital (LPCD), quien interpreta a Moritz Stiefel, comentó que en cada cuadro se presentan cuestiones filosóficas aunque no sea explícitamente, y todos ellos comprenden una obra profunda que representó un reto para él, para sentirlo naturalmente, pues fue su primera obra realista; sin embargo, aseguró que con la ayuda del director pudieron conseguirlo.
Otro método para mejorar su presentación fue el hablar y compartir escenario con actores más experimentados, como indicó Dante González, estudiante de Licenciatura en Psicología (LPSC), quien representó al Pastor Kaulbauch, un profesor y además un presidiario, papeles para los cuales se vio en la necesidad de aplicar una técnica de ciclos que le permitió cambiar de personajes en un instante.
“Tuve que mostrar personalidades similares sin ser él mismo, un par de narcisistas, pero uno es dogmático y el otro pragmático”, explicó.
Como señaló Galindo, el tema central es la falta de comunicación entre jóvenes y adultos, que no ha perdido vigencia y maneja un gran poder humanista.
A través de Despertar de Primavera el director afirmó que “el teatro no cambia al mundo pero expone la realidad para que el ser humano la cambie”, de modo que es el público quien hace al teatro.