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Héctor Diego Medina (izq.), conductor del programa Evolución Espiritual, que se transmite todos los lunes, a las 7:00 pm., por la 90.5 FM. Foto: Cortesía

La radio universitaria es un espacio para reflexionar sobre espiritualidad: Héctor Diego Medina


Por: Jimena Cuevas y Carolina Garza

La radio, como medio de comunicación, ha favorecido el debate público a lo largo de su historia. No obstante, es la radio universitaria la que, al desprenderse de los fines comerciales, da cabida a conversaciones más profundas y, en ocasiones, más personales. Para Héctor Diego Medina, su paso por Radio UDEM le ha permitido abordar una variedad de temas desde el lente de la espiritualidad.

A sus 47 años, el conductor ha tenido una trayectoria multifacética. Durante una década se desempeñó como conductor de noticias y director adjunto de Milenio Televisión. Además, impartió clases en la Universidad de Monterrey (UDEM) durante 12 años y sigue colaborando en diplomados en línea en diversas universidades. Actualmente, combina su labor con una consultoría de orientación vocacional y otros negocios, mientras se dedica al mindfulness, campo en el que está certificado como maestro.

En su búsqueda por integrar la espiritualidad en su vida y en la de los demás, creó el programa Evolución Espiritual, proyecto que surge a raíz de una profunda fascinación por la espiritualidad en sus múltiples facetas. Según Medina, su interés en el tema no se limita solo a aspectos teóricos, sino que también explora su aplicación práctica en la vida cotidiana y en contextos nacionales e internacionales.

La visión detrás del programa es ofrecer una perspectiva más personal que combine la teoría con la práctica, al abordar la espiritualidad desde diversos ángulos y tradiciones religiosas. Su objetivo es explorar las dimensiones de la espiritualidad y cómo éstas pueden aplicarse a la vida diaria. Aunque no recuerda con exactitud el número de programas realizados, Medina admite que el enfoque ha sido siempre brindar una reflexión profunda y accesible sobre la espiritualidad.

En entrevista con la Agencia Informativa UDEM, Medina describe los principales hitos y aprendizajes de su programa en Radio UDEM, comenta sobre su experiencia hablando de espiritualidad por este medio y puntualiza la importancia de la radio universitaria en la democratización del debate público.

¿Qué aprendizajes se ha llevado de la realización de este programa?

Personalmente, la preparación e investigación semanal sobre los temas a tratar me han proporcionado valiosas lecciones. Es crucial no solo entender la espiritualidad a nivel teórico, sino también aplicarla en mi propia vida. Cada semana, este proceso me brinda una pausa para reflexionar y me ayuda en mi práctica espiritual. Además, los comentarios de la audiencia amplían y enriquecen mi comprensión, ya sea a través de acuerdos o desacuerdos, lo que fomenta una mayor reflexión y a la vez mejora el contenido del programa. Estos dos aspectos, la introspección personal y el intercambio con los oyentes, han sido fundamentales en mi aprendizaje.

¿Cómo definirías tu relación con la radio? ¿Cuáles fueron tus primeras referencias como radioescucha que influyeron en tu carrera como periodista y en los medios?

Mi carrera en los medios comenzó en la radio mientras aún estaba en la escuela secundaria, participando en diversos programas y formatos. Aunque luego me incliné por la televisión y el periodismo, siempre he preferido la radio por su flexibilidad y capacidad de incitar una reflexión más profunda. Tener un programa en Radio UDEM me ha permitido explorar temas espirituales con libertad, algo que quizás no sería posible en una radio comercial, donde las restricciones de formato y publicidad son más rígidas.

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Héctor Diego Medina y Alan Zorrilla. Foto: Cortesía

¿Cuál crees que sea ese valor que le otorga la radio a la conversación pública a diferencia de los otros medios?

La radio destaca por su capacidad para fomentar una conversación dinámica y bidireccional. Aunque todos los medios permiten algún nivel de conversación, la radio facilita un intercambio más fluido y rápido. A pesar de los pronósticos sobre su desaparición con la llegada de la televisión y el internet, la radio se ha adaptado y sigue siendo esencial, especialmente con el auge del pódcast. La radio proporciona matices en un entorno mediático a menudo polarizado y sigue siendo vital para una discusión pública rica y variada.

¿Qué valor le aporta el programa al presentar un enfoque distinto al de los medios tradicionales? 

Los medios de comunicación y el periodismo se enfocan en informar sobre eventos de actualidad, pero a menudo carecen de tiempo para profundizar en algunos aspectos debido a las limitaciones de formato y tiempo. Mi programa, en cambio, no se centra en el periodismo, sino en la reflexión espiritual sobre eventos y temas, ya sean nacionales o internacionales. Esto me permite explorar la dimensión espiritual de diversas situaciones sin las restricciones típicas del periodismo, abarcando aspectos tanto teóricos como prácticos.

¿Qué es lo que distingue a la radio universitaria de otras estaciones?

La radio universitaria tiene un papel importante en el debate público al ofrecer un espacio para opiniones diversas y enriquecedoras. Recuerdo un episodio reciente donde los comentarios de los oyentes, que reflejaban diferentes perspectivas, contribuyeron significativamente a la conversación. Estos comentarios y preguntas ayudan a enriquecer el contenido del programa y fomentan la reflexión. La radio universitaria, al estar menos enfocada en el rating y la publicidad, puede ser más abierta y receptiva a una gama más amplia de voces y temas.

¿Qué tan relevante es una radio universitaria como factor en la democratización de la agenda y debate público?

En uno de los programas que más recuerdo, hace un par de años, se abordó un tema  desde un punto de vista espiritual y recibió varios comentarios de radioescuchas, algunos a favor y otros en contra, pero todos muy respetuosos. Hubo críticas desde la perspectiva de la no existencia que enriquecieron los programas posteriores. Me quedó muy grabado porque refleja el propósito de crear una síntesis de lo que los radioescuchas piensan y opinan. No siempre comentan, pero cuando lo hacen, suelen ser aportaciones y preguntas muy interesantes. Cuando veo que el programa genera reflexión y conversación, siento que se ha logrado el objetivo. No busco dar consejos o imponer ideas; más bien, comparto experiencias. Si las personas quieren profundizar en ello, excelente; si no, también está bien. Muchos programas se basan en eso: compartir experiencias, como es el caso de la meditación en sus distintas formas.

¿Cómo has visto a Radio UDEM cambiar con los años?

He visto una evolución clara en Radio UDEM a lo largo de los años, siempre mejorando, creciendo y ampliando sus horizontes. Desde que comencé a escucharla, incluso antes de empezar con los programas, ya me parecían muy interesantes algunos contenidos que no se encuentran en otras estaciones o en otros lugares. En aquella época, no había tantos programas de pódcast, pero ahora se han adaptado a las nuevas realidades, incluyendo las redes sociales. Radio UDEM es una estación de radio con muchas posibilidades y una base muy sólida, que es la misma Universidad, con una gran diversidad de temas en sus programas. La evolución de la estación es evidente y, sin duda, el futuro se ve muy prometedor.

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